Cuándo pensamos en Europa se nos viene al instante a la cabeza un modelo de vida perfecto y avanzado. ¿Por qué? Varios de las razones que podemos escuchar son el adjetivo que se ocupa para referirnos a ellos como primermundista, otros podrían decir que el Euro como moneda fuerte y común es lo que los lleva a ser tan bien valorados, algunos que el transporte público funciona como reloj, pero algo que realmente impacta es el que no se vean perros callejeros, la limpieza de sus calles, la conciencia ecológica y el trabajador como agente importante en la cadena de un producto.
Puede sonarnos lejanos o extraño, pero cada perro que uno ve en este continente va con collar y con su dueño al lado, no se ven perros vagabundos en ninguna parte. De hecho la preocupación porque el perro sea feliz, tenga un techo y comida es importante, de esta manera existen leyes que multan a la persona que son irresponsables y no mantiene bien a su mascota, o si no limpia los deshechos que deja su animal en la vía pública. Existe una obsesión y una intención mayor por la pulcritud y el aseo.
Europa no sólo es limpia porque hay personas que se preocupan por ello todos los días, sino porque no está en sus costumbres botar la basura en la calle o en donde los pille con los bolsillos llenos de papeles de helado, de mocos o lo que sea.
Siendo parte de lo mismo la conciencia ecológica es muy fuerte. Todo lo que pueden lo reciclan, desde cartón, plásticos, vidrios, hasta sostenes, pilas, corchos y cosas de metal. La gente tiene varios basureros de diferentes colores donde juntan cosas del mismo tipo. Una vez a la semana pasa un camión específico que retira el material a reciclar o sino van ellos a dejarlo a lugares destinados para reunir la “basura".
Algo que llama aún más la atención es que hay unos productos que tienen un símbolo en sus etiquetas que dice fair trade o trato o comercio justo Qué quiere decir esto, que todas las personas que están detrás del producto que uno tiene en frente o en la mesa de su hogar, fueron pagadas como se debe y tratadas dignamente. De este tipo de productos está lleno en Europa y la mayoría de las personas tienden a comprarlo, aunque sea valga unos centavos más.
Este tipo de cosas son las que generan más impacto y hacen notar su lejanía y su desarrollo con nosotros. Me parece muy potente hablar de que los europeos son perfectos, la perfección es algo casi inexistente, pero de todas maneras hay una conciencia más integra por los seres vivos y el medio ambiente. Cosas así deberíamos imitar sistemas y formas que traigan frutos sustentables para todos.